jueves, 4 de febrero de 2016

Todo lo que significa ser madre de varones

Ser madre de varones es ser una especie aparte, ni mejor ni peor, distinta. Les cuento algunas de las cosas que forman parte de esta vida

Qué significa realmente ser madre de varones?

- Aprender a patear una pelota para hacer un picadito cuando están aburridos.
- Visitar la guardia del hospital más veces de las que quisiera porque siempre aparece algún golpe nuevo.
- Buscar en Internet la fórmula secreta sobre cómo blanquear la ropa que tus hijos traen llena de barro.

- Recibir halagos como “sos la mujer más linda del mundo” o “pareces una princesa” cuando apenas te maquillas o te arreglas un poco. Aunque por otro lado, puede que vayas a la peluquería, te cambies el look completamente y que ellos ni se enteren. Depende el día.
- No hacerse demasiada historia con la ropa de tus hijos ya que siempre andarán con jean, remera y zapatillas. Los vestidos serán solo para ustedes o para ver en la vidriera pensando en tu sobrina o la hija de una amiga.
- Olvidarte de las muñecas con las que jugabas en la infancia par ver tu casa invadida de autitos, piratas, espadas, súper héroes y pelotas.

- Acompañar y enseñar a tu hijo a hacer pipí ¡parado!
- Estar en continuo movimiento porque ellos no paran un segundo, ni siquiera para lavarse los dientes.
- Ver cómo juegan con sus partes privadas y avergonzarse sabiendo que no lo hacen  solo enfrente tuyo
- Tener conversaciones, casi de debate nacional, sobre si un jugador es o no un “pecho frío”.

- Entender que el juego bruto es su favorito y que revolcarse entre ellos es más divertido aún.
- Descubrir la facilidad con la que se divierten a carcajadas por los ruidos extraños que extraen de su cuerpo.
- Enorgullecerte de la relación que tienen con su papá, viéndolos jugar o rockear juntos.

- Sentirse la reina de la casa porque, a pesar de todo, resultan ser los hombrecitos más caballeros del mundo con su amada mamá.

9 verdades que las mamás que sólo tiene varones deben saber

9 verdades que las mamás que sólo tiene varones deben saber

Tengo 3 hijos y ninguna hija. Cuando mis niños eran pequeños la gente me solía preguntar hasta el cansancio “¿Seguirás intentando tener una niña?”. Algunas personas incluso parecían contrariadas cuando les respondía que ya tenía todos los hijos que quería tener. Como si, por tener sólo varones, estuviese alterando el orden natural del universo.
A veces me dejaban callada con sus afirmaciones. A veces balbuceaba un intento de respuesta. Pero, con la sabiduría que dan los años, ahora aprecio la belleza, las ventajas y los desafíos irreprimibles que implican ser una madre que sólo tiene varones:

1. Eres su primer amor

Este punto es inevitable. Te enamoras de tus hijos y ellos de ti del modo más sano que puedas imaginar. Mi hermana (madre de sólo niñas) se maravillaba cuando mis niños me regalaban flores o acariciaban mi cabello. Aprenden de ti cómo amar a las mujeres y cómo ser amados por ellas.
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2. Eres su prototipo de mujer

¿Te estás comportando como un modelo a seguir en cuanto a respeto y amabilidad? Nunca es demasiado tarde para mostrarles que tú te mereces ser tratada con respeto, tanto por ellos como por tu esposo y el resto del mundo. Los niños con mamás que son fuertes y se respetan a sí mismas buscarán mujeres de similares características para formar pareja –y serán mejores parejas ellos mismos.

3. Tendrás remordimientos

Yo, por ejemplo, grité mucho. Mis hijos tenían casi todos la misma edad y eran muy propensos a hacer travesuras. Además, yo no era muy paciente. Ojalá me hubiese dado más respiros para pensar mejor y tomar mejores decisiones.
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4. Puedes tener dudas sobre tu hipotética hija

¿A quién se hubiese parecido? ¿Como quién se hubiese comportado? Un camino que no tomamos siempre nos hará pensar en los “y si…”. Puede que hayan momentos en que veas a una niña en la calle, pienses que ella pudo haber sido tu hija y sientas una punzada de angustia. Pero no te preocupes, pasará. Lo prometo.

5. No tendrás los dramas propios de las niñas

¡Ah, la angustia de todo! Los niños tienen su propio set de problemas (créeme) pero viven los altibajos emocionales de la pre-adolescencia y adolescencia de un modo más discreto.
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6. Tener hijos puede sentarte bien

Me tomó dos años darme cuenta, pero ahora sé que el tener hijos me hizo bien. Me gusta tener un tiempo para mí y las mamás de niñas simplemente carecen de este. Cuando mi hijo mayor era adolescente me dijo “mamá, me hubiese gustado que hubieses tenido una niña para que se pintaran las uñas e hicieran ese tipo de cosas juntas y no hubieses tenido que estar sola”. Lo que él no notó fue que esos momentos en “soledad” eran mi escape. Amaba no tener que llevar a un niño conmigo cuando quería hacer una actividad “de niña”.

7. Por algún motivo, son más seguros

Mi hijo de 20 años hizo un viaje que, desgraciadamente, no es seguro para nosotras. De todas formas me preocupo por mis hijos, pero en menor medida (y les enseño a respetar a las mujeres para que otras madres se puedan preocupar un poco menos por sus hijas).
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8. Siempre te sentirás así con ellos

¿Esa alegría pacifica de verlos dormir? Listo. ¿El saltito en tu corazón cuando entran en tu habitación? Listo. ¿La emoción maternal que dan sus abrazos apretados? Listo. Para ti siempre serán tus pequeñitos sin importar cuánto crezcan. Uno de los míos mide casi 2 metros y yo aún puedo ver su carita de niño pequeño cuando lo miro (hacia arriba).

9. Acepta el desafío

El criar a hombres buenos es hermoso y valorable. Hombres que son gentiles, amables y acogedores. Hombres que tratan bien a mujeres y niños. Hombres que se convertirán en esposos dedicados y amorosos. Esta responsabilidad es abrumadora pero tú tienes lo que hace falta para llevarla a cabo. Tienes esta oportunidad increíble. Disfrútala. Gánatela. Y luego cosecha las recompensas.

La bendición que es tener tres chicos

Tengo tres hijos, todos varones, ni una sola niña, no niego que en algun momento de mi vida no desié o deseo tener una niña pero si no es asi contaré con la bendicioón de tener cuatro hombres que viviran amandome para toda la vida.

Tengo tres maravillosos hijitos, y con cierta frecuencia frasesitas como estas:

— Tres chicos...Pues bueno, te cansarás mucho ¿no?.
— o peor tres varones seras empleada toda tu vida.
— Un hijo es un hijo hasta que encuentra a otra mujer: su esposa. Y una hija será una hija para toda la vida.

Me siento realmente bien de tener tres hijos y por lo general ese tipo de comentarios no me molestan en lo absoluto. (bueno, es cierto que a nadie le gustaría que su hijo se vaya de casa y nunca más se acuerde de ella).



Esta historia la encontre en una pagina de internet y fue contado por mujeres como yo, que tambien tienn tres niños.
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Todo ocurrió durante un desayuno familiar en un café con terraza. Alrededor el caos de siempre, ya te imaginarás “¡No, cómetelo todo“” ó “¡Deja de limpiarte las manos con la camisa de tu hermano!“, ”¡Mira lo que hiciste, ahora necesitamos buscar algo para limpiar la mesa!”, pero de repente toda esta locura se detuvo por un momento:
Una desconocida, de edad avanzada se acercó a la mesa y me dijo “Tienes unos chicos muy simpáticos”. Ella dudó un poco, como si no supiera si decir o no lo que siguió: “¿Sabes? -dijo sonriente y orgullosa- también tengo tres hijos. Se notaba que ella tenía más de 90 años y hablába de sus hijos como si hubiesen nacido apenas ayer. Le pedí que me contara un poco más sobre ellos y al final me dijo “Me cuidan mucho más de lo que hubiera podido hacer cualquier hija, estoy feliz de tenerlos”.
Sus palabras fueron muy alentadoras, y yo pensé que sería realmente maravilloso si un día estuviera en su lugar. Sentí un inusual orgullo de pensar que el fruto de mi vientre había sido tres hijos, tres buenos varones. Esa abuelita me dio tres razones que alegraron mi día, ella dijo lo siguiente:
  1. Mis niños tienen superpoderes, siempre espantan a la gente mala de nuestra casa, yo se bien que siempre serán mis protectores.
  2. Yo soy su chica querida, y me lo dicen cada día. Es muy bonito saber que durante toda mi vida me han visitado y amado tres simpáticos hombres sin importar los años que tengo.
  3. Cuando ellos están cerca no tengo que pensar siquiera en abrir la puerta del auto o de la casa yo misma.
  4. Cuando estaban pequeños siempre andaban construyendo cosas, y por la casa siempre había un poco de desorden pero eso me demostró que serían buenos hombres, capaces de cuidar a su familia. Y no me equivoqué.

Cuando esta linda señora se alejaba me acerqué y le dije “Gracias por haberme dicho eso”. Ella se dio la vuelta y nuestros ojos se encontraron por un momento. Fue una mirada de entendimieneto entre dos madres de varoncitos, que entendían bien lo que eso significaba, aunque fueramos de diferentes generaciones.
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Agradezco tambien haber encontrado esta lectura pues ahora mas que nunca considero que ser mamá de tres varoncitos es ganar la lotería,tengo un cercano ejemplo mi suegra solo tuvo dos varones los cuales la cuidan y la protegen siempre, toda el tiempo viven pendientes de ella y eso me hace pensar que mis hijos en algun momento tomaran el ejemplo de su padres y cuidaran de mi con mucho amor.

No niego que pienso intentar un cuarto embarazo y que me gustaria en lo profundo de mi alma que fuera niña, pero si Díos me bendice con otro bello varon entendere que Dios quiere que este ciudada y protegida por siempre.